¿Tienes ganas de pasar la noche en un queso Emmental? Hecho de madera y perspex, en medio de la naturaleza prístina y ofrece vistas sin obstáculos del cielo estrellado gracias a su techo de cristal. A través de los agujeros en el queso Emmental, los huéspedes pueden disfrutar de fantásticas vistas de las hermosas colinas Emmental que conducen desde el legendario Lüderenalp, que se hizo famoso por las películas de Gotthelf. La habitación de hotel al aire libre se encuentra en un claro del bosque a una altitud de 1.050 metros, a 20 metros de Gasthof Kuttelbad, una casa de huéspedes de 200 años que Jeremias Gotthelf llamó el "spa más dulce del cantón de Berna". Un lugar donde el tiempo parece haberse detenido. Los invitados se duermen con el murmullo de los árboles y el canto de los grillos.