A veces, hay algo mágico en cierto lugar. El Arenenberg es uno de estos, sin duda. La vista única sobre el lago de Constanza en el paisaje volcánico de Hegau, así como nuestras instalaciones completamente renovadas, hacen que sea fácil dejar caminos trillados y caminar por otros nuevos. La reina Hortense de Beauharnais residió allí una vez, con su hijo Louis, quien más tarde haría historia como el último emperador de Francia, Napoleón III. El museo de Napoleón todavía es testigo de esto hoy. El Arenenberg es un punto de partida perfecto para explorar la región alrededor del lago de Constanza en bicicleta, en ferry o a pie. En el Arenenberg imperial, se garantiza un sueño real. Las 40 habitaciones del hotel están ubicadas en el edificio principal de la mansión y ofrecen hermosas vistas al campo o al lago. Hay cuatro categorías de habitaciones disponibles para cada presupuesto.